La censura vuelve a estar de actualidad, en una época en la que se juzgan chistes y bromas y en la que los tribunales han llegado a secuestrar durante meses un libro  , la exposición “Vibraciones Prohibidas” muestra los efectos y consecuencias de la censura franquista a finales de los 60 y los 70. Consenciente del papel que jugaba la música en las revueltas internacionales de los sesenta, el régimen intentó limitar su alcance en una España cada vez más desarrollada y cosmopolita. La censura obligó a producir nuevas portadas —convertidas hoy en preciadas piezas de coleccionista— para rehacer las más escandalosas o eliminar referencias incómodas en los textos de las canciones. La exposición ‘Vibraciones Prohibidas’ recopila más de 200 portadas, tanto los originales como las retocadas por la censura y reflexiona sobre las influencia que la censura ha tenido en la producción musical de nuestro país hasta nuestros días.